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Ruedas dentadas & La vida de un estúpido »
Ryūnosuke Akutagawa
Manuel Álvarez
En El dios salvaje, ese manifiesto demoledor sobre el suicidio, Al Alvarez cuenta que los meses previos a que su amiga Sylvia Plath se suicidara fueron para ella de una creatividad asombrosa. Algo parecido, dice, pasó con Cesare Pavese, que se mató en el cénit de su potencia creativa. Otro buen ejemplo de esto, que no está en el libro pero cumple con creces lo que Alvarez destaca (la explosió...
¿Cómo vives? Sobre El niño y la garza y el cine de Hayao Miyazaki »
Matías Médeler
Hace ya unos veinte años, durante la producción de la película Ponyo, Hayao Miyazaki autorizó al director de cine Kaku Arakawa el rodaje de un documental sobre el trabajo realizado cotidianamente en el estudio Ghibli, aunque con una curiosa condición: la filmación debería ser unipersonal, teniendo solamente Arakawa acceso tanto a las instalaciones de Ghibli como al seguimiento de Miyazaki e...
Días perfectos, a pesar de todo »
Domin Choi
Un hombre se despierta temprano a la mañana, toma un café de máquina, mira el cielo, sonríe y se dirige a su trabajo que consiste en limpiar baños públicos. Casi exclusivamente de esas acciones infra-ordinarias, diría Perec, se compone este film de dos horas y cuatro minutos. ¿Qué tipo de película es Perfect Days? En principio, podemos decir que es una película japonesa hecha por un cin...
El resplandor de las pequeñas cosas. En torno a Perfect Days de Wim Wenders »
Alberto Silva
Una película “japonesa” como esta plantea dos cuestiones que conviene no separar ni confundir: la belleza de sus aciertos y la ambigüedad de una mirada no exenta de exotismo. En Perfect Days, ambos registros se conectan e intercalan, sin completa conciencia ni rígida coherencia.
1. Exotismos. Japón es un país que despierta un atractivo que puede ofuscar. Tiene algo de aquello que parec...
El crepúsculo del mundo »
Werner Herzog
Manuel Crespo
Durante una estadía en Japón, a Werner Herzog le propusieron conocer al emperador del país. Siempre según su fabulación autobiográfica, erigida a la par de su obra fílmica, el director de Nosferatu se negó de plano: ¿qué tenía él para decirle a un emperador? Preguntó, en cambio, si podía entrevistar a Hiroo Onoda, el famoso oficial de inteligencia que pasó treinta años en una isla ...
Gejigeji »
Mariela Vita
Daniela Varone
Cruzamos la puerta de la galería Del Infinito y una manzana gigante cortada al medio parece mirarnos fijo a los ojos. ¿Nos mira con cara triste o es nuestro cerebro que nos hace ver rostros en objetos inanimados? ¿Pareidolia facial? En el universo de Mariela Vita las semillas de la fruta son, sin duda, ojos tiernos. En el fondo de la sala, una naranja y un pequeño pino se acercan en una pintur...
El gran espejo del amor entre hombres »
Ihara Saikaku
Alberto Silva
Al frecuentar la tradición literaria japonesa descubrimos que los occidentales hoy tenemos preocupaciones que para los japoneses son ocupaciones corrientes desde hace siglos. Lo dicho se aplica a los temas sexuales. Y a este libro, publicado en Kioto en 1687 y traducido al castellano en su integralidad por Amalia Sato.
El amor homosexual masculino no es rara avis en las letras niponas. Se enma...
Cabezas y vientre »
Riichi Yokomitsu
Manuel Crespo
La primera línea del primer cuento habla de un tren que avanza rápido a mediodía mientras las estaciones quedan atrás como piedras a las que nadie, ciertamente no el lector, debería dar importancia. El protagonista de Cabezas y vientre es eso que se agita dentro del vehículo, una potencia que incluye a los pasajeros sin limitarse a ellos. Aunque la trama acabe truncando el viaje en favor de ...
Kokoro »
Natsume Sōseki
Manuel Crespo
Maestro y discípulo: ¿quién de los dos necesita más al otro? ¿Quién elige a quién? ¿Hasta cuándo se es discípulo, y desde cuándo maestro? La primera mitad de Kokoro —algo así como “corazón” en japonés, título que los traductores españoles de la novela decidieron conservar— da respuestas oblicuas a esas tres preguntas. La información que provee la anécdota es escasa: un es...
Drive My Car »
Ryūsuke Hamaguchi
Graciela Speranza
En el cuento de Haruki Murakami “Drive My Car” (así en inglés en el original, con un guiño irónico a la pareja jovial de la canción de los Beatles), un reconocido actor japonés contrata a una veinteañera esquiva como chofer particular para llevarlo al teatro seis días a la semana. Le han detectado un glaucoma y ya no puede conducir, pero se irá viendo de a poco en las conversaciones c...
Juntando espigas en los campos de Buda »
Lafcadio Hearn
Juan F. Comperatore
Las fotografías lo muestran siempre de perfil. Dicen que perdió el ojo izquierdo a los nueve años en un accidente y el otro apenas toleró el estrabismo. Para entonces, también había perdido a sus padres, embarcados cada uno en sus propios proyectos en distintos puntos del orbe. Privado de algo más que de un ángulo de referencia, su mirada parece dirigirse siempre a otro lugar. No habría q...
La mujer de la falda violeta »
Natsuko Imamura
Miguel Sardegna
Todos la conocen como la mujer de la falda violeta porque jamás la vieron vistiendo una falda de otro color. Desde lejos podría pasar por una colegiala, pero de cerca enseguida se rechaza esa idea. Las manchas de sus pómulos y la sequedad del pelo cuentan otra historia.
Natsuko Imamura construye en La mujer de la falda violeta el retrato de una mujer moderna, que vive en Japón pero que podr...